Recientemente y debido a un seguimiento y análisis realizado por el Fepasde, se ha identificado que los odontólogos están siendo sancionados con la suspensión de su tarjeta profesional, debido a la ausencia o mal diligenciamiento del consentimiento informado. Hoy queremos traerte algunas recomendaciones para que protejas el ejercicio de tu profesión:
Recuerda que el consentimiento informado representa un acto en salud que consiste en la comunicación efectiva, veraz y oportuna que tiene el profesional de la salud con su paciente, en el cual explica cuál es el tratamiento o procedimiento que propone para el manejo de su patología, cuáles son los beneficios que el mismo puede traer para su salud, qué otras alternativas existen para su caso, entre otros. A la hora de diligenciarlo es importante que tengas en cuenta que:
- Es un proceso de información del cual se deja registro en un documento y en la historia clínica.
- Debe contener los riesgos previstos y beneficios para el caso particular de cada paciente.
- Este proceso debe ser llevado a cabo por el profesional a cargo del procedimiento a ejecutar y nunca se puede delegar a personal auxiliar o administrativo.
- Si la información no es presentada al paciente se compromete la responsabilidad ética y patrimonial del profesional.
- Todo acto profesional que involucre la generación de un riesgo o afecte los derechos del paciente requiere llevar a cabo el consentimiento informado.
Por lo anterior, te invitamos a seguir los siguientes puntos clave:
- Datos generales del paciente: Datos de identificación condición, antecedentes y contradicciones.
- Tratamiento: Tratamiento idóneo, alternativas, riesgos, beneficios y consecuencias.
- Alcance de las obligaciones: Obligaciones de medio y no de resultado, posibilidades de no
- mejoría, autorización para la atención de hallazgos y autorización para la atención de complicaciones.
- Recomendaciones: Recomendaciones previas y posteriores al tratamiento, así como signos de alarma.
- Disentimiento informado: Debes informar sobre la posibilidad de no autorizar el tratamiento o de revocar la autorización después de otorgada.
En tus manos está que un buen consentimiento informado proteja el ejercicio de tu profesión.